miércoles, 30 de mayo de 2007

Capitulo 1: LA FORMA CORRECTA

Es importante aprender la forma correcta de tatuar desde el principio; deberías leer este libro página a página para empezar a tener una idea general sobre lo que implica el tatuaje. Más tarde, podrás volver a cada capítulo para estudiarlo detenidamente.

Una de las primeras cosas que tienes que considerar es que vas a ser un profesional. Esto quiere decir que vas a tener una habilidad muy desarrollada, y deberás mostrar una actitud apropiada a dicho estatus. Cuando un tatuador profesional entra en su propio estudio, todas las distracciones de su forma de vida deberán haberse dejado en casa. El estudio es un lugar de negocios (tu propia inversión), y deberá ser tratado siempre como tal. No deberá ser un centro de reunión o un sitio donde la gente vaya a pasar el tiempo. Si dejas que lo sea, tu inversión no durará mucho y esta es la forma más absurda y rápida de adquirir una mala reputación, y ésta es una situación difícil de cambiar y llegar a establecerte como profesional reconocido.

Lamentablemente, mucha gente que empieza tatuando lo deja muy pronto. Esta es una situación muy común y no debería sucederle a nadie que lea este libro. Esta clase de gente puede haberse equivocado al comprar su equipo hasta el punto de no saber manejarlo apropiadamente, experimentan, fallan, y desisten; Es frustrante y acaba con la carrera de un tatuador incipiente en muy corto tiempo.
El mejor consejo para empezar es el de comprar el mejor equipo que puedas procurarte, de marcas reconocidas que ofrezcan buena calidad y garantía de sus productos. El rendimiento de un equipo barato será deficiente y poco profesional. Un mal equipo limitará el progreso, así que intenta comprar lo mejor de lo que esté a tu alcance. Todas las herramientas del oficio son deducibles, y de las adquisiciones de calidad nunca te arrepentirás. La gran mayoría de los aparatos se pueden adquirir en servicio de venta por correo y más aún a pagos a contra entrega. Mientras que la experiencia del tatuador va en aumento, la elección del equipo se convertirá en una cosa muy personal y cada individuo acabará con diferentes combinaciones de herramientas y materiales.
Una buena forma de aprender las bases de este arte es hacerte uno(s). Esto te ayudará a decidir si estás hecho para este tipo de trabajo. Busca al mejor artista de tu zona y pide hora para hacerte un

tatuaje. Desde el momento en que entres hasta el momento en que salgas, observa todo lo que puedas, no hagas un millón de preguntas, simplemente observa cómo trabaja el artista. Podrás aprender mucho de esta manera.
Una lección muy dura de la vida es que nada viene por sí solo. Todo el mundo tiene que esforzarse si quiere conseguir algo. Con paciencia y tiempo verás que el negocio crecerá firme y constantemente, pero esto solo ocurrirá si realizas buenos trabajos y sobretodo limpios. Las buenas costumbres deberán formarse desde el principio. Estas costumbres deberás tenerlas tan metidas en la cabeza, que se convertirán en una segunda naturaleza.
Nadie debería sumergirse así como así en el mudo del tatuaje, es mejor empezar poco a poco, manteniendo el trabajo habitual hasta que se haya logrado establecer como tatuador reconocido por su buen trabajo. Algunos conocimientos de administración son muy importantes, y seguramente te convendrá consultar algún libro sobre cosas como contabilidad, impuestos, disposiciones legales, etc.
Una cosa que deberás tener clara es que estás en este negocio por ti mismo, y que tu meta es la de ofrecer al público unos trabajos altamente artísticos a cambio de ganarte la vida. Esto significa tener contacto con mucha de gente, por lo tanto ganar mucho dinero. Nunca decepciones al público ni a tus admiradores. Ellos incrementarán su respeto, confiarán en ti, mientras les sigas ofreciendo trabajos de calidad, confían en que seas competente y profesional y pagan un buen dinero para que lo seas.
Tatuar es una cosa única debido al elemento misterioso de perdurabilidad que lleva implícito, esto puede atraer a mucha gente y alejar a otra. Tal y como están las cosas, cuando un trabajo está acabado es difícil de retirar, un fallo, y ya está, el trabajo está arruinado. El trabajo artístico realizado sobre el cliente es un testimonio vivo de tu habilidad como tatuador y es más que probable que lo estén luciendo por ahí el resto de sus vidas.

“UN TATUAJE ES UNA FORMA DE ARTE EN LA QUE EL CLIENTE ES EL LIENZO”.